Atravesando el norte peruano

Perú

Llegamos a Perú 

Después de nuestro paso por Ecuador, llegó la hora de ingresar a nuestro segundo destino, Perú, la ruta para llegar desde Machala fue corta y al cabo de poco más de una hora estábamos haciendo el papeleo para ingresar oficialmente a Perú, en el paso fronterizo encontramos un grupo de moteros colombianos que estaban haciendo ruta en El Cañón del Pato en Perú quienes nos regalaron  dos SIM card de Peru con saldo 😄.

Parceros colombianos de regreso del cañon del pato en Peru

Terminado el papeleo seguimos con la intensión de llegar hasta Mancora, un pequeño pueblo de características similares a Montañita,  donde Beldam nos dejo organizada la dormida. Nos esperaba la doctora Emy, una odontóloga peruana que vive en este paradisíaco lugar.

 En el camino paramos a almorzar en Zorritas, una playa de pescadores muy bonita y sentimos el cambio de los alimentos automáticamente,  pues un almuerzo corriente en la calle me supo a plato de restaurante fino en Colombia, ¡que delicia!.

Primera comida en Peru, sensacional y barata

En la imagen se puede observar el primer plato que probamos en Perú, que grata sorpresa nos llevamos con su gastronomia, y eso que solo estábamos comenzando, Que delicia.

En casa de la doctora Emy

Después en Mancora cuando cenamos, pedimos simplemente pollo asado y este vino muy bien acompañado y con un sabor genial, que buena comida, simplemente genial.

Despues que descansamos un tiempo, nos pusimos comodos y Emy termino su jornada laboral, salimos a conocer un poco el pueblo a conocer la playa, las discotecas, a tomar unas cervezas y a disfrutar el lugar. Mientras caminamos por la playa pudimos observar gran cantidad de animales acuaticos como caracoles, peces saltando al lado del mar,  cangrejos y pequeños peces en las rocas cercanas a la playa.

Tomamos algunas cervezas cusqueñas (recomendadas de Emy) al lado de las discotecas mientras nos relajábamos hablando y simplemente disfrutando la compañía

Al día siguiente partimos rumbo al ñuro, una playa donde pudimos nadar con tortugas marinas, grandiosa recomendación de nuestra anfitriona, una experiencia increíble.

Playa el Ñuro, nadando con tortugas

Seguimos nuestro camino rumbo al Amazonas peruano donde nos esperaba la Motoposada de Thomas y su familia, en un pueblo cercano a Piura (Catacaos).

En el camino Yeison sufrió un pinchazo cerca al final de la tarde, ya a unos pocos kilómetros del objetivo, bajamos la llanta, cambiamos el neumático (cámara en Perú) con la mala fortuna que el neumático nuevo resultó ser de un tamaño diferente al original y se pincho de nuevo, en ese momento amarramos la llanta en mi moto, y salí a buscar donde reparar el neumático. A unos 20 km encontré un lugar donde no querían atenderme por que estaban cerrando, (justo al final del dia).

Primera pinchada de la llanta en nuestro viaje

Desierto peruano, cerca a Piura

Les explique mi situación que mi compañero estaba en medio del desierto esperando a que regresara con la llanta reparada para poder continuar nuestro camino, y un camionero de la región ayudó en la tarea de convencer al dueño para que me ayudara. Al final repararon la llanta y fui por Yeison a seguir nuestra ruta, llegamos tarde pero aun asi, Thomas nos espero pacientemente.

En la casa de Thomas nos acogieron y nos hicieron sentir de nuevo como en casa, el parcero Thomas nos llevó a un restaurante cercano a su casa a cenar un delicioso plato, no nos permitió pagar la cuenta (estuvimos muy apenados), en su casa nos quedamos dos noches. Por lo que nos sucedió con el pinchazo,  decidimos hacerle un pequeño mantenimiento a las motos: cambiar el aceite del motor, aceitar la cadena, apretar tornillos, etc. Aprovechamos el sábado para dar una vuelta con familiares de Thomas, tomamos cerveza, estuvimos hasta tarde en la calle hablando y disfrutando el momento. Ademas conociendo un poco la cultura 

En Catacaos con la cena deliciosa.

Después de un buen descanso, y el adhesivo en nuestras motocicletas, continuamos nuestro camino, dejando atrás a un gran amigo, con la promesa de pasar de nuevo por su hogar al regreso de nuestra aventura.

Calca en mi moto lista para viajar por toda America.

Al día siguiente partimos rumbo a Moyobamba, donde afortunadamente había un contacto de Motoposadas. Cuando regrese a Colombia habrá una nueva, en mi casa (motoposada de Juaco).

Las Motoposadas

Conocer las Motoposadas cambió nuestro viaje de una manera muy positiva, dado que es una comunidad de moteros que dan auxilio a otros moteros que están de viaje, brindando un lugar donde dormir o un espacio donde se puede armar la tienda de dormir (carpa), o en caso de no poseer un espacio te dan guía en la ciudad, te recomiendan un hostal barato y sobre todo, te dedican su tiempo, además te recomiendan lugares para visitar, te acompañan o consiguen alguien de algun club de moteros de la ciudad que te pueda guiar mientras conoces su región.

Dejando huella en la primera motoposada

La primera motoposada que nos acogio fue el hogar de Giovanny y Genny en el progreso ecuador, la verdad al ser nuevos en este tipo de comunidad nos sorprendio en gran medida la amabilidad con la cual nos acogieron, sinceramente fue sentirse en familia con perfectos desconocidos.

Moteros de Playas Ecuador, embarcandonos para ir a ver delfines

Gracias Giovanny, Jenny Xavier y Nidia, nuestros primeros parches

Nuestro primer contacto con las Motoposadas fue en casa de Genny y Giovanny Amo, dos moteros colombianos (Putumayo), que en sus ratos libres se dedican a hacer rutas a lo largo y ancho de Ecuador, Colombia y Perú, viven con su hijo Danny, Nidia (hermana de Giovanny) y su esposo Javier, entre otros miembros de la familia. Nos recibieron con tal amabilidad que el sentimiento era de estar en casa de algún familiar. Nos dieron alimentación y un lugar para dormir, adicional nos invitaron a ir a visitar Playas, a ver los delfines en su estado natural y conocer la Playa Delfín,  para ello reunieron un grupo de moteros los cuales nos acompañaron y al siguiente día estuvimos ruteando los alrededores de Playas.

Intercambiamos calcomanías (adhesivos) y empezamos a llenar nuestra moto de recuerdos, amistades inesperadas e increíbles, en total estuvimos dos noches en casa de la familia Amo y siempre estaremos agradecidos con ellos, espero algún día tenerlos en mi hogar y poder atenderlos y mostrarles el Oriente Antioqueño.

Después de haber pasado por casa de Giovanny y Genny quería conocer a Beldam que fue quien nos contactó con la primera experiencia de Motoposada, su casa estaba en el camino hacia Perú, en Machala, como él trabajaba hasta el final de la tarde, programamos el viaje para llegar cuando empezara la noche y conocer el precursor de las Motoposadas, por tal razón salimos el miércoles 31 de agosto temprano rumbo a Machala con una larga escala en Guayaquil donde aprovechamos para recorrer la ciudad un poco. Almorzamos después de conocer un poco la ciudad almorzar y reposar tranquilamente, salimos hacia Machala.

Beldam.

En  la foto junto al amigo Beldam, el Creador del chat MAI, gran persona y apoyo incansable a los moteros que recorren nuestro continente

Los caballos de acero descansando en la casa de Beldam

Es un personaje digno de ser conocido, llegando a su casa nos perdimos, pero él salió a buscarnos, por tal motivo llegamos a Machala más tarde de lo planeado. Nos invitó a su casa, hablamos sobre nuestras intensiones de viaje y nos contó aun más sobre las Motoposadas, nos compartió contactos, recomendó lugares y programó la Motoposada para los dos siguientes días.

Preparó un ceviche de camarones exquisito, escuchamos buena música, hablamos largo y tendido.

Lo increíble de Beldam es la facilidad que tiene para no parar de hablar con uno mientras esta atendiendo las redes sociales y mantiene el ritmo e hilo de todas las conversaciones, saca fotos publica en Facebook, sube imágenes a los grupos de WhatsApp, responde a varios de sus contactos y todo mientras habla con nosotros y prepara un rico ceviche.

Así en casa de Beldam concluye nuestra segunda semana de viaje, fueron 12 días geniales de visita en Ecuador, un hermoso país con paisajes increíbles y gente amable.

Gracias Ecuador, pronto estaremos de regreso a seguir disfrutando de tu gente y hermosos lugares.